Si pudieras volver a los recuerdos,
vivirlos de nuevo con toda intensidad,
te quedarías atrapado en ellos,
mientras pasan los días
y tu vida se estanca,
y tú flotas.
Sería la droga más peligrosa,
yo caería.
Quizá ya he caído,
aunque siento que mis recuerdos se desvanecen entre mis dedos
quedando cubiertos por un velo de idealización,
que me impide ver con claridad que hay detrás de él.
Odio que mi memoria flaquee,
¿Por qué no retienes cada detalle?
Los necesito para reconstruir toda la historia,
y para esconderme
no me valen pinceladas.
Estoy huyendo,
no sé a dónde.
Y aunque rechazo compañía
porque solo yo puedo encontrarme,
en el fondo deseo que alguien me salve,
o que me acompañe
en este camino lleno de piedras.